8/4/08

Si ellas pueden, yo también


Hundo los dedos en la tierra húmeda
para plantarme y restaurar en mí la primavera,
para que la paciencia olvide el tic tac de la mañana
y crezca libremente por mis manos.
Noto el calor y suavidad de un rostro de agua,
mirándome con húmedos ojos titilantes.
Miro al cielo,
lámparas cuelgan del vacío,
Si ellas pueden, yo también.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encantó el verso: "...mirando con húmedos ojos titilantes...

¡Fantástico!

Besitos...

José Ignacio Montoto dijo...

Tú también puedes, no te quepa le menor duda!

Anónimo dijo...

Muy chulo el blog...Salu2