Hundo los dedos en la tierra húmeda
para plantarme y restaurar en mí la primavera,
para que la paciencia olvide el tic tac de la mañana
y crezca libremente por mis manos.
para plantarme y restaurar en mí la primavera,
para que la paciencia olvide el tic tac de la mañana
y crezca libremente por mis manos.
Noto el calor y suavidad de un rostro de agua,
mirándome con húmedos ojos titilantes.
mirándome con húmedos ojos titilantes.
3 comentarios:
Me encantó el verso: "...mirando con húmedos ojos titilantes...
¡Fantástico!
Besitos...
Tú también puedes, no te quepa le menor duda!
Muy chulo el blog...Salu2
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