A la Pili
El ritual es sencillo
Las hijas se colocan en posición de visionado,
las madres remueven durante una hora:
- medio kilo de sosa cáustica
- tres litros de agua
- tres litros de aceite usado.
Blanqueados los nudillos,
limpias las manos,
es el turno de las hijas.
Frotar y aclarar.
Es el jabón que lava más blanco.
Frotar y aclarar.
Comienzan a despellejarse los nudillos.
Frotar y aclarar.
Empieza a brotar la sangre.
Frotar y aclarar.
La sangre más limpia.
Las madres lo recomiendan a las hijas
para manchas difíciles.
5 comentarios:
Gracias Veronica por este poema, cuando lo escuché de tu leve voz en La Espiga me fascinó, evocador y duro.
Gracias a ti por escuchar estos pequeños gritos poéticos, estas cosas son las que me recuerdan que merece la pena seguir escribiendo.
Ya lo sabes todo nena...
what a hit...
loviu!
Un poema impresionante, pero tú no eres nada sosa... :)
Me encantó la primera vez que lo oí en el Moloko. Me sigue encantando. Es un testigo entre varias generaciones.
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